Entre Barbies y bebotes

Voy a ser sincera: estoy ogullosa de haber jugado con Barbies toda mi niñez antes que con bebotes.
Siempre fui una "Barbie Girl", tuve mas de 15 barbies, el auto de barbie, las mascotas de barbie, ropa (original y hecha por mi madrina) para las barbies, diferentes cepillos para peinar las barbies, tuve la barbie sirena, la barbie que le cambiaba el color de pelo, la barbie corazones, la barbie surfista, y dejo de contar porque los voy a volver locos ; Era, -y quiza soy-, tan "barbie girl" que aun sostengo que el mejor regalo de navidad que me hicieron fue la casa de barbie.
Si, siempre fui esa clase de niña y lo agradezco. Porque mas alla de lo que diga mi madre acerca de que las barbies te queman la cabeza y te hacen seguir un estereotipo imposible de belleza, siento que jugar con barbie me hizo mas mujer, pero no cualquier mujer, sino una mujer que se cree capaz de cualquier cosa y mas importante aun: autosuficiente (cabe destacar que nunca tuve ningun ken, ni lo pedi que me lo compren).
Jugar con barbies iba mas alla del juego en si. ¿No recuerdan estar horas y horas preparando la casa e inventando historias antes de empezar el juego? Yo si, y amaba la previa al juego. Amaba juntarme con mis amigas e improvisar historias cual telenovela, inventarnos nombres e ingeniárnoslas para hacer de cualquier objeto que encontrábamos en la casa un mueble para las barbies. Con las barbies mezclabamos realidad con fantasia, armabamos un circo de nuestros deseos futuros, nos veiamos como queriamos ser en un mañana y, al menos por un rato, lo eramos. No nos quedabamos con ser simples "rubias 90-60-90", ibamos mas alla y resolviamos los dramas que nosotras mismas inventabamos. Alimentabamos a la imaginacion y con cada barbie nueva- que obviamente pasaba a ser la favorita- nos haciamos un mundo nuevo.
 Existen millones de barbies diferentes: existen barbies blancas, negras y morenas; existen barbies japoneas, holandesas, hawaianas; pero mas importante aun existen barbies que desempeñan cualquier empleo que se les ocurra, desde una barbie maestra hasta una barbie astronauta. 
En cambio, jugar con bebotes solo nos imponia que debiamos desvivirnos por nuestros hijos, que solo las mujeres debiamos cuidarlos (porque no existen bebotes para niños), que estambamos destinadas desde pequeñas a tener hijos. Si jugas con bebotes, y te dejas llevar por los ideales que transmite, jamas te volveras una mujer dependiente, jamas creeras que no querer tener hijos es una opcion de vida y no sabras establecer prioridades mas alla de ser una ama de casas. Porque es asi, los bebotes no te venian con otra opcion mas que la de ser madre y atender su llantos o darles mamaderas. 

Es por eso que a diferencia de lo que cree mi madre hoy me planto en estas palabras para decirles que jugar con barbies no te quema tanto la cabeza como jugar con bebotes; y si, acepto que estoy haciendo objetivo algo que es totalmente subjetivo, pero de eso se trata: jugar con barbies me enseño que puedo pensar y hacer lo que yo quiera. Jugar con barbies va mas alla de un estereotipo estetico, jugar con barbies es una idea de que las mujeres podemos llegar a mas. Asique, a aquellos que creen que barbie  representa una unica perfeccion estetica, me atrevo a decirles que la realidad es total
mente lo opuesto... y si no me creen entren a ver todos los modelos de barbies que hay, les aseguro que les sorprendera lo que encuentren...

Me despido mientras mi barbie favorita (que extrañamente no fue la ultima que me compraron) me observa orgullosa desde la estanteria...